{"id":1859,"date":"2020-06-22T04:41:10","date_gmt":"2020-06-22T04:41:10","guid":{"rendered":"https:\/\/afanador.com\/retaguardiamag\/?p=1859"},"modified":"2021-10-12T23:25:21","modified_gmt":"2021-10-12T23:25:21","slug":"porque-en-las-obras-de-arte-hay-tan-pocas-sonrisas","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/retaguardiamag.com\/2020\/06\/22\/porque-en-las-obras-de-arte-hay-tan-pocas-sonrisas\/","title":{"rendered":"Porque en las obras de arte hay tan pocas sonrisas?"},"content":{"rendered":"

Durante la historia humana registrada, la sonrisa abierta ha sido \u00abprofundamente pasada de moda\u00bb,\u00a0observ\u00f3 el<\/a>\u00a0escritor Nicholas Jeeves en su ensayo \u00abThe Serious and the Smirk: The Smile in Portraiture\u00bb.\u00a0 Hoy, percibimos y valoramos la sonrisa como una indicaci\u00f3n de amistad, felicidad o afecto.\u00a0Es un requisito previo para las fotograf\u00edas, para entablar amistad, para generar una aprobaci\u00f3n.\u00a0Los occidentales de siglos pasados \u200b\u200bse abstuvieron de sonre\u00edr para retratos para evitar mostrar su dentadura perforada por las caries y con piezas dentales faltantes, la mala higiene dental era tan com\u00fan que no se consideraba un detractor del atractivo.<\/p>

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foto portada Commonwealth Sofonisba Anguissola\u00a0 Club<\/figcaption><\/figure>

Por Jorge Afanador <\/p>

En el mes de febrero del presente a\u00f1o, Madrid pudo disfrutar la exhibici\u00f3n de las pinturas de Sofonisba Anguissola en el Museo del Prado, Prado, y entre las obras exhibidas una sonrisa muy especial hizo que pensara por que raz\u00f3n los museos son tan fr\u00edos y sin sonrisas e sus obras. <\/p>

Seg\u00fan la cr\u00edtica<\/a>, \u00a0existen encontrado explicaciones de todos los tipos. Para posar para un retrato al \u00f3leo llevaba d\u00edas completos,as en sesiones agotadoras. Es decir, una sonrisa hip\u00f3crita para mantenerla es pr\u00e1cticamente imposible , la risa es un acto espont\u00e1neo y es tal vez uno de los mas dif\u00edciles de fingir., pues esta como el sonrojo o verg\u00fcenza implican reacciones imposibles de permanecer en el tiempo, sujetas a las emociones , impulsos y a una serie de movimientos y tensiones musculares faciales, nunca cotidianos, que adem\u00e1s son muy dif\u00edciles de interpretar por el artista. <\/p>

El concepto sobre las sonrisas ha ido variando a lo largo de la historia en cuanto a su connotaci\u00f3n cultural. En el siglo XVII, por ejemplo, la clase aristrocr\u00e1tica y los hist\u00f3ricos mecenas del arte, relacionaban las sonrisas amplias mostrando los dientes con la clases social baja, los bufones, los actores y los borrachos, como los Vel\u00e1zquez inmortaliz\u00f3 en su obra el\u00a0Triunfo de Baco<\/em><\/a>. Los retratos que mostraban amplias sonrisas no se correspond\u00edan, pues, con la solemnidad perseguida por la mayor\u00eda de las personalidades que pod\u00edan costearse una obra de este tipo.\"\"<\/p>

El triunfo de Baco, de Vel\u00e1zquez, 1628 -1629, en el Museo del Prado<\/p>

Los artistas del barroco holand\u00e9s inmortalizaron el d\u00eda a d\u00eda eligiendo protagonistas para sus obras, a personajes de los niveles m\u00e1s bajas de la sociedad. La risa casi parece un factor com\u00fan. En\u00a0El hijo pr\u00f3digo<\/em><\/a>, de Gerrit van Honthorst el claroscuro y la escena jocosa, clandestina esta inundada de sonrisas. En muy pocas ocaciones esta escena sali\u00f3 de la expresi\u00f3n art\u00edstica que interpretaba las clases bajas, opuestas a la alta en donde las emociones no se deb\u00edan exteriorizar, al pueblo, a la masa que en cierto modo los consideraba semidioses, y estos sus indudables amos sin ninguna debilidad terrena por lo mundano. <\/p>

El hijo pr\u00f3digo, de Gerrit van Honthorst, 1623, en la Alte Pinakothek de M\u00fanich.Rembrandt en algunos de sus autorretratos los expres\u00f3 con risa, que pueden considerarse\u00a0predecesores de nuestros selfis<\/a>As\u00ed, para Jones, el\u00a0Autorretrato<\/em>\u00a0de\u00a0Marie Louise \u00c9lisabeth Vig\u00e9e-Lebrun<\/a>\u00a0con su hija, de 1786, es sumamente revolucionario: porque es uno de los primeros que dejan escapar (aunque muy ligera) una sonrisa.Autorretrato de Marie Louise \u00c9lisabeth Vig\u00e9e-Le Brun con su hija, 1786, en el Museo del Louvre, en Par\u00eds<\/p>

Un excelente ejemplo de la vida y la poca vida que trat\u00f3 de representar es The Laughing Violinist<\/em> de 1624. Desde el Renacimiento, cualquier referencia a la m\u00fasica en la pintura generalmente se interpretaba como un s\u00edmbolo de amor. Van Honthorst, nuevamente inspirado por Caravaggio, quer\u00eda ir mucho m\u00e1s all\u00e1, con connotaciones sexuales tan expl\u00edcitas como para abrir nuevos caminos. Y as\u00ed, su violinista risue\u00f1o no solo tiene una expresi\u00f3n lasciva y una risa casi audible, sino que est\u00e1 haciendo un gesto con la mano universalmente entendido. Lo que es bastante brillante de la pintura es que, por s\u00ed sola, atraviesa los l\u00edmites del gusto contempor\u00e1neo con pura habilidad (al igual que las pinturas de Caravaggio). Pero cuando est\u00e1 colgado, seg\u00fan lo previsto, inmediatamente a la derecha de su retrato Girl Counting Money<\/em>, queda claro a qui\u00e9n se dirige la burla. Es un di\u00e1logo expl\u00edcito, tal como lo hizo Leonardo con la Mona Lisa<\/em> , pero sin la pretensi\u00f3n de sutileza. Van Honthorst resuelve el problema de la sonrisa abierta asegur\u00e1ndose de que la veamos tal como existe, no como una expresi\u00f3n, sino como una reacci\u00f3n.<\/a><\/p>

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El violinista de risa de<\/em> Gerrit van Honthorst (1624) – Fuente<\/a> .<\/p>

En\u00a0Nicholas Nickleby<\/em><\/a>\u00a0(1838-39) de\u00a0Charles Dickens,\u00a0la retratista Miss La Creevy reflexiona sobre el problema:<\/a>… La gente est\u00e1 tan insatisfecha e irrazonable que, nueve de cada diez veces, no hay placer en pintarlos.\u00a0A veces dicen: \u00ab\u00a1Oh, qu\u00e9 serio me ha hecho ver, se\u00f1orita La Creevy!\u00bb\u00a0y en otros, \u00ab\u00a1La, se\u00f1orita La Creevy, qu\u00e9 sonrisa!\u00bb … De hecho, solo hay dos estilos de pintura de retratos;\u00a0lo serio y la sonrisa;\u00a0y siempre usamos lo serio para las personas profesionales (excepto los actores a veces), y la sonrisa burlona para las damas y caballeros privados que no se preocupan tanto por parecer inteligentes.<\/p>

Los holandeses, probablemente aliviados al ver la parte posterior del estricto r\u00e9gimen calvinista del siglo XVI, celebraron su vida cotidiana y sus experiencias con el arte que fue hecho para ser inclusivo.\u00a0Una actitud tan relajada nunca tuvo \u00e9xito en pa\u00edses donde prevalec\u00eda una actitud m\u00e1s protectora hacia la clase.\u00a0<\/p>

A lo largo de la historia es posible encontrar algunas excepciones, aunque con sonrisas sutiles y ambiguas. Antonello da Messina, pintor del Renacimiento italiano, pas\u00f3 a la posteridad por inmortalizar a muchos de sus retratados con una media sonrisa, supuestamente como reflejo de sus sentimientos y de su vida interior. Sin ir m\u00e1s lejos, su\u00a0Retrato de marinero desconocido<\/em><\/a>\u00a0se ha considerado durante mucho tiempo como la sonrisa m\u00e1s enigm\u00e1tica del arte, hasta que fue desbancado por\u00a0La Gioconda<\/em>.\"\"Retrato de marinero desconocido, de Antonello da Messina, 1465-1470, en el Museo Mandralisca, Cefal\u00f9, Italia<\/p>

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Detalle de La Gioconda, de Leonardo da Vinci, 1503-1516, en el Museo del Louvre<\/figcaption><\/figure>

Efectivamente,\u00a0La Gioconda<\/em>, que Leonardo da Vinci pint\u00f3 a comienzos del siglo XVI, empez\u00f3 a atraer m\u00e1s y m\u00e1s atenci\u00f3n durante el siglo XIX, hasta que acab\u00f3 convirti\u00e9ndose en la sonrisa (aunque tambi\u00e9n sea leve) m\u00e1s llamativa del arte. \u00bfPor qu\u00e9 aparece sonriendo la protagonista del retrato? La respuesta es un enigma,\u00a0como casi todo lo que rodea a esta obra<\/a>. Incluso con el paso de los a\u00f1os han seguido surgiendo nuevas teor\u00edas en torno a ella. En 2018, un cient\u00edfico lleg\u00f3 a decir que una afecci\u00f3n en la tiroides le obligaba a mantener esa expresi\u00f3n, aunque muchos otros estudiosos\u00a0tampoco terminan de verlo claro<\/a>.<\/p>

Vaya a saber c\u00f3mo Leonardo persuadi\u00f3 a la Mona Lisa para que sonriera;\u00a0su expresi\u00f3n de labios apretados probablemente era bastante dif\u00edcil de mantener.\u00a0La\u00a0ambig\u00fcedad inducida por el\u00a0sfumato<\/em>\u00a0de su significado habla al debate m\u00e1s amplio sobre la boca en el retrato: \u00abun conflicto en curso entre lo serio y la sonrisa\u00bb, escribe Jeeves.\u00a0\u00bf\u00a0La Joconde<\/em>\u00a0ofrece a sus televidentes una invitaci\u00f3n coqueta o un desprecio burl\u00f3n?\u00a0<\/p>

Enigm\u00e1tica, intrigante, coqueta y seductora, la sonrisa de la Giocondo ha recibido siglos de adoraci\u00f3n y cr\u00edticas que e resumen en las comisuras de sus labios… John Ruskin afirm\u00f3 que se trataba simplemente de una \u00abcaricatura\u00bb, a lo que un joven llamado Walter Pater respondi\u00f3 en su\u00a0Renacimiento<\/em><\/a>\u00a0: \u00abTodos los pensamientos y experiencias del mundo han grabado y moldeado all\u00ed … el animalismo de Grecia, la lujuria de Roma, el misticismo de la edad media con su ambici\u00f3n espiritual y amores imaginativos, el regreso del mundo pagano, los pecados de los Borgia … ‘<\/p>

El artista franc\u00e9s Marcel Duchamp en 1919 cre\u00f3 triunfalmente su versi\u00f3n, aumentando la sonrisa con un elegante bigote y titul\u00e1ndola\u00a0LHOOQ<\/em>\u00a0, que solo exacerb\u00f3 las cosas de manera deslucidamente dada\u00edsta.\u00a0(LHOOQ traduce fon\u00e9ticamente como ‘ella tiene un culo caliente’, pero tambi\u00e9n se relaciona con una expresi\u00f3n idiom\u00e1tica de ‘fuego abajo’.) Para Jules Michelet, ella pudo haber sido objeto de amor rom\u00e1ntico: para Duchamp, ella era el objeto de esp\u00edritu masturbaci\u00f3n.<\/p>

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Yo dir\u00eda que la sonrisa m\u00e1s grande de Leonardo en realidad aparece en su\u00a0San Juan Bautista<\/em>\u00a0(ca. 1513\u201316), que es una imagen bastante desconcertante.\u00a0De hecho, la sonrisa de complicidad de San Juan es un fen\u00f3meno mucho m\u00e1s com\u00fan en la historia del arte occidental.<\/p>

La sonrisa tambi\u00e9n contiene una gran cantidad de significados culturales e hist\u00f3ricos discretos, la mayoria de de ellos desalineados con nuestras percepciones modernas de calidez, disfrute o incluso felicidad.\u00a0En el siglo XVII en Europa era establecido que los pobres, borrachos, lascivos y bufones eran las \u00fanicas personas que sonre\u00edan ampliamente. Para las clases altas mostrar los dientes era una violaci\u00f3n a la etiqueta y la formalidad.\u00a0San Juan Bautista De La Salle, en\u00a0Las reglas del decoro cristiano y la civilidad<\/em><\/a>\u00a0de 1703, escribi\u00f3:<\/a>Hay algunas personas que levantan el labio superior tan alto … que sus dientes son casi completamente visibles.\u00a0Esto es completamente contradictorio con el decoro, que proh\u00edbe que descubras tus dientes, ya que la naturaleza nos dio labios para ocultarlos.<\/a><\/p>

Filosofemos, si un pintor hubiera persuadido a su modelo para que sonriera, para plazmarlo en el lienzo, radicalizar\u00eda inmediatamente el retrato, por inusual e indeseable.\u00a0A esto hay que a\u00f1adirle que casi siempre el artista era contratado por una paga, y con seguridad tambi\u00e9n tendr\u00eda exigencias de entrada que respetar.<\/p>

John Singer Sargent, en su estudio de 1890 ya entrando en la era industrial, hizo un retrato para la\u00a0se\u00f1orita Eleanor Brooks<\/em>\u00a0, a quien dibuj\u00f3 con una sonrisa que logra ser verdaderamente c\u00e1lida y civilizada.\u00a0Desechando lo logrado posteriormente lo transform\u00f3 con una expresi\u00f3n m\u00e1s compuesta en el trabajo final, claramente insatisfecho con el resultado, o tal vez criticado. El mismo expres\u00f3: \u00abUn retrato es una imagen de una persona con algo mal en la boca\u00bb.\u00a0Que pas\u00f3 por su mente para corregir esta obra?, es un interrogante pero si es claro que un pintor de su capacidad le fue dif\u00edcil, finalmente, reconciliar la sonrisa con su reputaci\u00f3n.<\/a><\/p>

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Izquierda: estudio de John Singer Sargent para\u00a0
Miss Eleanor Brooks<\/em>\u00a0(1890) – Fuente.\u00a0
Derecha: Detalle de la pintura terminada (1890) –\u00a0
Fuente<\/a>\u00a0.Jssgalley<\/figcaption><\/figure>

La fotograf\u00eda empez\u00f3 a transformar esta tara de la sociedad y las expresiones empezaron a ser captadas expontaneamente, un ejemplo son las fotografias de Abraham Lincoln que nos dejan ver un hombre m\u00e1s conocido que la mayor\u00eda, en su d\u00eda, por su sentido del humor, ya que hab\u00eda una serie de historias bien conocidas sobre \u00e9l que regularmente provocaban risas entre los que estaban en su compa\u00f1\u00eda.\u00a0Si bien hay algunas im\u00e1genes informales de \u00e9l con un aspecto claramente avuncular, un ingenio no elimina la esclavitud sin una fuerte oposici\u00f3n cr\u00edtica, y en su imagen m\u00e1s conocida, el ‘Retrato de Gettysburg’, adquiere la expresi\u00f3n m\u00e1s grave imaginable.\u00a0Tan poderosas son estas im\u00e1genes que as\u00ed es como generalmente se lo recuerda hoy.\u00a0Mark Twain, un contempor\u00e1neo de Lincoln,carta al\u00a0Sacramento Daily Union<\/em><\/a>\u00a0:<\/a>Una fotograf\u00eda es el documento m\u00e1s importante, y no hay nada m\u00e1s condenatorio para bajar a la posteridad que una sonrisa tonta y tonta captada y arreglada para siempre.<\/p>

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Dos fotograf\u00edas tomadas del presidente Lincoln por Alexander Gardner.\u00a0
Izquierda: tomada en 1865 –\u00a0
Fuente<\/a>\u00a0.\u00a0Wikimedia
Derecha: tomada en 1863 –\u00a0
Fuente<\/a>\u00a0. Wikimedia<\/figcaption><\/figure>

En el siglo XX, las sonrisas se fueron haciendo algo m\u00e1s comunes en el arte. Las mejoras en la fotograf\u00eda y la aparici\u00f3n del cine fomentaron su uso como una forma de revelar las emociones internas de los retratados, lo que se tradujo en que algunos artistas se lanzaran a explorar su potencial expresivo. El expresionista abstracto Willem de Kooning, por ejemplo, recurri\u00f3 a la sonrisa para representar su\u00a0Mujer I<\/em><\/a>, la primera de su serie de mujeres en las que rechaza la figura tradicional femenina de la Venus e inmortaliza una figura casi demon\u00edaca, muy influenciada por las diosas paleol\u00edticas. La sonrisa le sirve para potenciar su fiereza.\"\"Woman I, de Willem de Kooning, 1950\u201352, en el Museo de Arte Moderno de Nueva York<\/p>

Tal vez el ejemplo m\u00e1s destacado de artista con un uso de la sonrisa constante a lo largo de su producci\u00f3n es el de\u00a0Yue Mijun<\/a>, artista chino enmarcado dentro del Realismo C\u00ednico chino, que constantemente se autorretrata con sonrisas especialmente exageradas, casi maniacas. Influenciada por la historia del arte oriental en su representaci\u00f3n de Buda y la publicidad, lo que oculta su risa es, en realidad, una profunda cr\u00edtica pol\u00edtica y social del pa\u00eds en el que vive.<\/p>

\"La
Yue Minjun<\/a>La resurrecci\u00f3n<\/a><\/em>\u00a0,\u00a02010
Galer\u00eda de \u00f3pera<\/a><\/figcaption><\/figure>

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Cielo azul y nubes blancas’ del artista chino Yue Minjun durante la Feria de Arte ‘Art Paris’, en 2014.\u00a0FRANCOIS GUILLOT\/AFP\u00a0(Getty Images)<\/p>

\"
Kerry James Marshall<\/a>Un retrato del artista como sombra de su\u00a0
<\/a>…<\/em>
\u00abKerry James Marshall: Mastry\u00bb en MCA\u00a0
<\/a>…<\/figcaption><\/figure>

La introducci\u00f3n de la fotograf\u00eda tambi\u00e9n supuso un salto enorme en la reproducci\u00f3n de las sonrisas. Aunque esto no ocurri\u00f3 desde el principio, ya que las fotograf\u00edas transmiten seriedad y solemnidad causada tambi\u00e9n por las limitaciones tecnol\u00f3gicas, que exig\u00edan tiempos de exposici\u00f3n elevados para lograr plasmar las instant\u00e1neas. Pero, en realidad, incluso cuando las c\u00e1maras mejoraron reduciendo estos tiempos, la ausencia se mantuvo salvo algunas excepciones como la famosa fotograf\u00eda titulada\u00a0Eating rice, China<\/em><\/a>, de la expedici\u00f3n del historiador Berthold Laufer tomada en 1904,, Laufer un historiador y antrop\u00f3logo de expedici\u00f3n en el extranjero, ssinti\u00f3 necesario capturar la esencia y diferencias culturales del pa\u00eds en el que se encontraba. <\/p>

\"The<\/figure>

En los \u00faltimos a\u00f1os, los selfies, los abrazos, las expresiones de afecto inundaron los \u00e1lbum de fotograf\u00edas, hoy las redes sociales son un homenaje a la sonrisa, acompa\u00f1ada de tratamientos dentales en todas las esquinas de las ciudades, de la privacidad pasamos a la total exposici\u00f3n de nuestra intimidad. La transformaci\u00f3n digital de las im\u00e1genes puede templar los musculos faciales para recrear una intrigante Monalisa en un aburrido rostro. <\/p>

Referencias<\/p>

Porque las sonrisas son tan raras en la historia del arte? https:\/\/www.artsy.net\/article\/artsy-editorial-smiles-rare-art-history<\/a><\/p>

El serio y la sonrisa La sonrisa en el retrato https:\/\/publicdomainreview.org\/essay\/the-serious-and-the-smirk-the-smile-in-portraiture<\/a><\/h5>

\u00bfExistieron los dientes en el Renacimiento?\u00a0Arte y la sonrisa con dientes, 1300-1600 https:\/\/longstreet.typepad.com\/thesciencebookstore\/2009\/01\/jf-ptak-science-books-llc-post-464—did-teeth-exist-in-the-renaissance-well-while-breezing-through-a-bunch-of-art-monograp.html<\/a><\/p>

Porque en las obras de arte sonrie tan poca gente? https:\/\/verne.elpais.com\/verne\/2020\/06\/08\/articulo\/1591612785_835894.html<\/a><\/p>

Artista renacentista Sofonisba Anguissola https:\/\/www.commonwealthclub.org\/events\/2020-02-04\/renaissance-artist-sofonisba-anguissola<\/a><\/p>

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